Creo que este texto realmente invita a hacer una reflexión sobre como era entendido el término restauración en el Renacimiento:
"Cosme
había traído ya de Roma algunas antigüedades. Entre ellas había colocado en su
jardín, en la puerta que da a la calle Ginori, la escultura de un Marsias de
mármol blanco, colgado de un tronco para ser desollado, considerada una obra
maravillosa. Tras la muerte de Cosme, a Lorenzo le había llegado igualmente un
torso con la cabeza de otro Marsias, muy antiguo y mucho más hermoso que el
otro. Y como su autor consideró que cuando Marsias es desollado se veían los
músculos rojos y algunos nervios de la figura había tomado un bloque de mármol
rojo que tenía algunas finas vetas blancas y talló este Marsias, que una vez
pulido parecería algo muy real. Quien lo contemple llegará a la conclusión de que
este artista ejecutó esta figura con arte hermoso y apropiado. Lorenzo quiso
acompañarlo del otro, para que se pusiera en el centro de la puerta y, como le
faltaban los brazos, los muslos y las piernas, mandó llamar a Andrea. Con el
ingenio que le caracterizaba, lo enderezó y le añadió los trozos de mármol con
tanta diligencia que Lorenzo quedó más que satisfecho"
Giorgio
Vasari (ed. Méndez Baiges y otros, 1998): Las
vidas de los más excelentes arquitectos, pintores y escultores italianos desde
Cimabue a nuestros tiempos. Madrid, p.290.
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